El secretario del Trabajo, Javier Lozano, ya lo confirmó: 2010 será el año de la Reforma Laboral y ya existe una propuesta consensuada que en febrero se pondrá a consideración de los legisladores.
En esta propuesta destacarán dos puntos: se formaliza la contratación temporal, mejor conocida como outsourcing y se limita a 20,000 el número de afiliados a un sindicato, con lo que también se busca poner fin a los poderosos y eternos líderes gremiales.
Todavía no entra la propuesta a discusión, pero este último punto se perfila ya como el que despertará más polémica, pues en el futuro se impediría la conformación de poderosos sindicatos como el SNTE que afilia a más de un millón de maestros en el país o el del Seguro Social que agrupa a 367,000.
Los diputados del sector obrero ya se están moviendo para ver cómo le hacen, pues esto sería algo así como el tiro de gracia para las ya de por sí debilitadas centrales obreras.
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