DIÁLOGO EMPRESARIAL
La Organización para la Cooperación Económica y Desarrollo (OECD) publicó este pasado lunes la expectativa de crecimiento de la economía mundial. Se espera un 3.3% de crecimiento, mejor que lo publicado en septiembre (3.2%), sin duda sorpresivo dados los hechos políticos ocurridos recientemente. Lo interesante de este crecimiento es que se basa en estímulos fiscales que darán los países, que vienen a fomentar la economía ante la baja inversión y acelerado proteccionismo al comercio. Considerando la incertidumbre que genera en la economía mundial la elección en Estados Unidos y el Brexit, son relevantes las proyecciones de crecimiento para ambos países: Estados Unidos pronosticado en un 2.3% y Inglaterra en un 1.2%, le sigue la Unión Europea 1.6% y Japón al 1%. De manera contraria, China se espera crezca un 6.4%, casi tres veces más que Estados Unidos, a este crecimiento le atribuye la OECD variables diferentes a los demás países como innovación, infraestructura, políticas fiscales y más tratados comerciales aunados a exportaciones. En referencia a los estímulos fiscales, particularmente Estados Unidos estará explorando un tema de reducir tasas fiscales sobre ingresos para fomentar el gasto y la inversión, por años el PIB ha crecido como resultado de la innovación tecnológica e inversión. La razón por qué China va a crecer mucho más que varias economías juntas, es debido a que por los últimos 10 años invierten entre 30% y 45% del PIB en capital de trabajo, es decir que de 100 dólares se regresan entre $30 y $45 a la economía. En contraste nuestro país se ha caracterizado por dos inversiones: la primera como consecuencia de la inversión extranjera directa y la segunda en símbolos o elementos de política social que no fomentan la productividad.
Los indicadores antes mencionados nos dan una referencia para un futuro cercano, la dependencia de estados unidos crea incertidumbre a la economía y no a un sector particular como lo manejan algunas fuentes. Consideremos que EU al fomentar la inversión a través de la reducción de impuestos, va a traer como resultado que una parte se invierta en negocios actuales para crecer y prepararlos con tecnología; excelente oportunidad asociada al TLC es en 5 millones de empleos en ese país. En segundo lugar esa inversión interna vendrá a utilizar cadenas productivas actuales y robustecerlas, en los estados fronterizos de California, Arizona, Nuevo México y Texas dependen del TLC alrededor de 1 millón de empleos indirectos excluyendo la agricultura, así también esos estados exportaran en 2016 México 132.7 mil millones de dólares.
En el contexto para Estados Unidos el TLC tiene alrededor de 57 mil empresas netamente americanas participando activamente en el TLC, las cuales en 2015 comercializaron 584 billones de dólares o $1,600 millones diarios, cualquier disrupción al TLC y las cadenas productivas afectará el PIB, la inversión, el crédito y finalmente el consumo.
Enviado desde mi iPad
Comentarios